La histórica empresa Petroquímica Río Tercero atraviesa una de sus crisis más graves: el 14 de junio ingresó formalmente en un concurso preventivo de acreedores, un proceso judicial que busca reestructurar sus deudas ante la imposibilidad de hacerles frente.
La crítica situación financiera derivó en una restructuración interna con impacto directo en el empleo. En julio, 124 trabajadores fueron afectados:
- 58 trabajadores del gremio químico están en conciliación obligatoria hasta el 4 de agosto.
- 34 empleados administrativos en Buenos Aires fueron desvinculados.
- 32 operarios jerárquicos y supervisores fueron despedidos el 16 de julio sin recibir aún las indemnizaciones legales, lo que motivó acciones legales por parte de los afectados.
- 13 trabajadores de UOCRA fueron dados de baja el 27 de julio. Para el 28 de julio se fijó una audiencia con el Ministerio de Trabajo.
Mientras tanto, la incertidumbre crece entre los empleados y la comunidad riotercerense, que ve con preocupación el destino de una de sus empresas más emblemáticas.
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Información sacada del portal de noticias El Ojo Web.
